“¡¿Si grito más alto que tú tengo más razón?! ¿Si hablo mucho más alto eso convierte mis palabras en verdad?”-Joe Wilson
Tanta fama ha cogido Paul Greengrass y el hiperrealista estilo documental que logró imprimirle a las dos últimas entregas de `La Saga Bourne´ que parece que muchos tienden a olvidarse con demasiada facilidad de que la primera entrega (El Caso Bourne, 2002) era ya una estupenda película de acción e intriga realista, que a su modo hizo posibles esas dos magnificas continuaciones. Esta película estaba dirigida por un prometedor director en alza llamado Doug Liman, que por alguna razón dejó el testigo de esa saga a Greengrass para centrarse en otros proyectos, menos serios y más comerciales.
No creo ser demasiado duro al afirmar que `Sr. Y Sra. Smith´ (id, 2005) era una chorrada sin demasiado sentido, prediseñada para explotar la recién formada pareja de Brad Pitt y Angelina Jolie, y pesar de tener algún momento políticamente incorrecto algo divertido y acción bien rodada, poco aportaba este título a la carrera de Liman. Otro gigantesco paso atrás fue `Jumper´ (id, 2008), nuevo intento fallido de levantar una saga para adolescentes a partir de una base literaria, y que no era más que una aburrida introducción a un universo completamente insustancial. De nuevo nos encontrábamos con unos efectos decentes y unas escenas de acción bien rodadas, con profesionalidad, pero definitivamente inservibles.
Sosa crónica y tardía denuncia
Visto el poco éxito obtenido con su anterior trabajo, parece ser que Liman decidió que ya era hora de volver a tomar las riendas de su carrera, tomarse las cosas más en serio. Esa es la única razón que se me ocurre para que haya decidido dirigir una película tan completamente opuesta a sus dos tontos últimos trabajos, y definitivamente la menos comercial que ha rodado hasta ahora. Pues a pesar del tramposo título en español (así como los avances publicitarios) nos hacen pensar en una película de acción e intriga (al estilo de las de Bourne), lo cierto es que `Caza a la Espía´ (Fair Game) es una crónica de los sucesos que precedieron a la invasión de Irak, así como de las mentiras que rodearon todo lo referente a las famosas “armas de destrucción masiva”.
El film está basado en las novelas “The Politics of Truth” de Joshep Wilson y “Fair Game” de Valerie Plame Wilson, y nos narra precisamente la historia de este matrimonio y su intervención en los acontecimientos que rodearon toda esa sucia trama, así como su posterior lucha por defender la verdad enfrentándose a las duras represalias y campaña de difamación que realizó en su contra el gobierno de los Estados Unidos. Una historia verídica, una lucha contra la injusticia y una denuncia política eran las principales bazas de esta historia a priori bastante interesante. Pero, una cosa es el potencial de una historia y otra que sea explotado adecuadamente.
Desde el primer momento, la historia de `Fair Game´ no engancha. Doug Liman se muestra tan increíblemente soso narrando las actividades de Valerie Plame que hace pensar que ser espía debe de ser el trabajo más aburrido del mundo. Da igual que estemos hablando del trabajo de campo (sus viajes a Irak) o las diversas conversaciones se mantienen en los despachos (soporíferas). Liman parece haber perdido toda la capacidad visual que tenía, y utiliza la cámara de una manera mediocre y en ocasiones torpe e incoherente, moviéndola como queriendo conseguir el estilo realista de su colega Greengrass para su particular crónica.
Tampoco ayuda que durante la primera mitad de la película se intente jugar a contarnos a modo de intriga algo que a estas alturas creo que todo el mundo ya sabe: que las armas de destrucción masiva no fueron más que la excusa para ir en busca del preciado petróleo. No es que Liman esté descubriendo la pólvora precisamente. Así pues, entre que el espectador va varios pasos por delante de lo que se narra y entre que el director no logra contarlo con pasión, la primera mitad de `Caza a la Espía´ resulta de lo más aburrida. Desde luego Paul Greengrass se mostró bastante más acertado tocando este mismo tema con `Green Zone´ (2010), que no era mucho más que la trasladación de la acción de `La Saga Bourne´ a Irak, pero que lograba entretener al mismo tiempo que realizar una pequeña critica social (un tanto frívola, pero efectiva).
Algo mejora la peli cuando la acción sale fuera de los despachos y se centra en la particular lucha de la familia Wilson contra el todopoderoso estado. Es entonces cuando `Fair Game´ se convierte en un drama intimo con bastante más interés que la historia que se nos estaba contando hasta el momento. Por supuesto, Liman sigue igual de soso e impersonal, pero la película se apoya más en las actuaciones de Sean Penn y Naomi Watts y sale ganando, sin ninguna duda. Ambos interpretes (que ya habían trabajado juntos en la magistral `21 Gramos´) realizan estupendos trabajos, logrando dar interés a la trama. Especialmente notable resulta la pasión que le pone Penn (actor abiertamente de izquierdas y uno de los más firmes opositores a la invasión de Iraq) en su caracterización del marido de la mujer espía, cuya necesidad de defender sus ideales les coloca a ambos en el ojo del huracán.
Al final, se entiende que la película de Liman quiere ser la crónica del triunfo de la verdad contra los engaños y las mentiras, la victoria de una pequeña familia contra el gran gobierno. Pero el problema es que a estas alturas (cuando ya está todo el pescado vendido como quien dice) lo cierto es que `Caza a la Espía´ resulta una denuncia algo tardía, por no decir completamente caducada. Más que una autocrítica a los errores de su nación, la cosa suena a auto-justificación por parte de los americanos. “No, es que no sabíamos...”, “no, es que nos engañaron y manipularon...” Todo muy autoindulgente, lejos de la honestidad y atrevimiento demostrados por Robert Redford en su apasionante `Leones por Corderos´ (Lions for Lams, 2007).
En definitiva, el intento de Doug Liman por acercarse al cine adulto se traduce en una película sosa, plana e impersonal, que no hace justicia al jugoso tema que trata. Cierto es que resulta mejor que sus dos anteriores memeces, ¡pero es que estamos hablando de un film que apunta bastante más alto! Si juzgamos `Caza a la Espía´ en consecuencia a lo que aspira a ser, resulta tristemente un gran fracaso, cuya única valía reside en sus dos actores principales.
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