`El Circo de los Extraños´, decente entretenimiento juvenil

“¡Universidad, trabajo, familia! ¡Universidad, trabajo, familia! Y un día, si tienes suerte, le estarás repitiendo a tu propio hijo estas mismas palabras.”

-El padre de Darren

Uno podría llegar a pensar leyendo mi crítica de `Eclipse´ que detesto todo el cine juvenil o “de adolescentes” por el simple hecho de ser lo que es. Nada más lejos de la realidad. Hay mucho buen cine para adolescentes, y es cierto que en general es un tipo de cine muy infravalorado (como el infantil). Pero considero que se han hecho entretenimientos juveniles magistrales, como por ejemplo: la trilogía `Regreso al Futuro´, `Los Goonies´ o más recientemente `Harry Potter y el Prisionero de Azkaban´ (concretamente este título de la saga me parece excepcional).

`El Circo de los Extraños´ no es (ni de lejos) tan buena como ninguna de esas tres películas mencionadas. Lo que sí es la película (basada en la saga literaria escrita por Darren Shan) es un buen entretenimiento de esos de los de pasar el rato, que no se toma excesivamente en serio a sí misma y que en ningún momento insulta la inteligencia del espectador. Con esos tres elementos ya se desmarca totalmente de la saga de vampiros brillantes y licántropos metrosexuales creada por Stephenie Meyer.

La película (que llegó a nuestras pantallas el pasado 16 de julio, con nueve meses de retraso con respecto a su estreno en USA) está dirigida por Paul Weitz (`American Pie´, `Un Niño Grande´) el hermano del también director Chris Weitz (que ha dirigido también adaptaciones de sagas literarias juveniles pero con bastante menos fortuna: `La Brújula Dorada´ y `Luna Nueva´), y está protagonizada por jóvenes actores acompañados de algunos más veteranos: John C. Reilly, Salma Hayek, Ken Watanabe y Willen Dafoe (más bien un cameo). Además, en el guión ha metido mano el propio Weitz y Brian Helgeland (`L.A. Confidential´, `Robin Hood´). En general un equipo bastante competente, que hacía presagiar un entretenimiento decente.

Precedido por unos títulos de crédito muy originales (con una banda sonora de Stephen Trask al más puro estilo Danny Elfman) se nos introduce sin mayor dilación en la vida de Darren Shan (mismo nombre que el autor de las novelas): un muchacho joven, popular y buen estudiante (por lo menos son honestos y no nos cuelan a un guaperas disfrazado de friki) que tiene la vida “perfecta” pero que sin embargo se junta con un bala perdida: su amigo Steve, que es todo lo contrario que él. Eso le hace meterse en lios y recibir riñas por parte de sus padres, que le explican lo que hace falta para ser un hombre de bien (y se nos quitan a todos las ganas de serlo, por cierto). Un día llega un circo de monstruitos a la ciudad y Darren y su colega, aburridos como están por su convencional vida, deciden acudir a escondidas una noche.

Una serie de desafortunados acontecimientos provocarán que Darren quede a merced de uno de los monstruos del circo – el vampiro interpretado por Reilly – y que se vea obligado a aceptar su oferta de convertirse en su ayudante medio vampiro. Pero hay algo que Darren ignora, y es que él y su amigo Steve forman una parte vital de una futura guerra que se avecina entre vampiros y vampenezes (que son la misma especie, pero los primeros no están de acuerdo con matar a humanos, y por ello se desprecian mutuamente).

Llama la atención que lo que parecía ser el elemento clave de toda la historia – el circo y sus ocupantes – no sean más que un elemento secundario. No es que no tenga su relevancia, pero sin duda es un elemento bastante más anecdótico de lo que cabría esperar (vamos, que poco tiene que ver esta película con `Carnival´). La inminente guerra entre los vampiros y los vampenezes, así como el destino de Darren ocupan casi todo el film, sin demasiado tiempo para que tenga una verdadera función en la gira de ese circo de rarezas, ni para conocer a cada uno de sus integrantes. Su paso por el circo se basa en entablar amistad con su compañero de tienda – el chico serpiente – así conocer a una chica con la que introducir la típica historia de amor – la chica mono, y no va a coña – y en limpiar la caca de un par de jaulas. Poco más.

Pero lo cierto es `El Circo de los Extraños´ (en el original `The Vampire´s Assistant´, algo así como `El Aprendiz de Vampiro´, que es un título bastante más apropiado) es un film bastante más ingenioso e interesante de lo que puede parecer a simple vista. Detrás de su mascara de cine juvenil se esconde una trama bastante más oscura e impactante de lo que suele ser lo normal en este tipo de productos (hoy día reducidos a espectáculos para teenagers en celo). Impactante y oscura es por ejemplo la idea del fingimiento de la muerte de Darren – por no decir muerte a secas, porque manda huevos... – y el abandono a su familia para convertirse en vampiro.

Otro claro ejemplo es la enemistad que nace entre Darren y su mejor amigo. Y es que no hay mejor villano que un antigua amistad, por las connotaciones emocionales y dramáticas que ello conlleva (el enfrentamiento entre dos amigos es algo tan antiguo, tan básico, que siempre funciona, aunque en este caso quede un poco reducido a riña entre colegiales), y el personaje de Josh Hutcherson (`Un Puente hacia Terabithia´, `Zathura´) es perfecto para ello. Además, nos da un claro ejemplo de la oscuridad inusual en este tipo de productos mezclada con cierto tono desenfadado en la escena en la que Steve se cobra a su primera víctima como vampeneze: su profesor (el sueño de muchos estudiantes hecho realidad).

Algo bastante menos estimable es el villano en la sombra (Mister Mini, que ansía la guerra entre las dos razas de vampiros), que es un personaje muy poco tenebroso (realmente comparable a un malo de los Lunny Toones) y que estropea bastante el conjunto (ver la escena en la que le explica al personaje de Josh Hutcherson su papel en la trama). Al igual que el empeño por dejar el final inacabado por esa manía de dejar muchos cabos sueltos para resolverlos en futuras secuelas, que sabe dios si finalmente verán la luz (visto el fracaso que fue en Estados Unidos seguramente no).
Eso es algo que nunca llegaré a entender: el no llevar una historia hasta sus últimas consecuencias simplemente por tener presente la idea de saga por encima de la idea de película. ¿Acaso no se dan cuenta de que hay que convencer con esa primera entrega antes que nada? Por eso en los últimos años se han dado casos vergonzosos de intentos de grandes aventuras que no son más que largas presentaciones sin un final satisfactorio: como `Eragon´ o la misma `La Brújula Dorada´.

`El Circo de los Extraños´ no llega a esos extremos (de hecho: tengo entendido que está basada en los primeros tres libros de la saga, así que dentro de lo que cabe han resumido la historia bastante), pero tampoco es todo lo redonda que podría haber sido si se hubiese optado por una historia completamente cerrada (que considero que habría sido lo apropiado, pues tampoco es que sea una gran historia que requiera de mayor extensión). Y todo por lo mismo: por pensar más en el dinero que en la calidad.

De no ser por esto último y por una especie de moraleja barata que intentan colar hacia el final sobre lo que significa ser humano (lo que nos define son nuestros actos, no lo que somos, bla, bla, bla…) no me cabe ninguna duda de que `El Circo de los Extraños´ sería de las mejores películas basadas en sagas literarias adolescentes estrenadas en los últimos años. Desde luego mucho mejor que `Eragon´, `La Brújula Dorada´, `Crepúsculo´, `Percy Jackson´ e incluso alguna de las más flojas de `Harry Potter´.

Con respecto a los actores lo único que se puede decir es que cumplen (y tampoco se requiere mucho más). De los jóvenes igual Chris Massoglia es el que está más soso, o igual es que el papel de protagonista le viene grande, pero tampoco diría que lo hace mal. Algo mejor noto a Hutcherson (actor con algo más de experiencia que el primero pese a su juventud), que parece pasárselo bastante bien interpretando a un pequeño psicópata (mucho más interesante que el papel de héroe, la verdad). ¿De los veteranos? Pues Reilly está fantástico interpretando a un vampiro algo amargado, y los demás pues se dejan ver por ahí en un par de escenas, y poco más (aunque en las pocas escenas en las que salía Hayek me pareció que estaba horrible, o igual es que me ha condicionado verla con barba y se me ha caído el mito erótico...).

En definitiva, `The Vampire´s Assistant´ es una película entretenida, con un ritmo decente y visualmente vistosa (aunque sin exagerar tampoco con los efectos). Es además algo más ingeniosa y divertida de lo que cabría esperar (lo cual es de agradecer), y se preocupa por ofrecer una verdadero conflicto entre los personajes, y aunque no logre llevarlo todo hasta un clímax satisfactorio no deja de resultar un entretenimiento bastante decente.