sábado, 3 de septiembre de 2011

`La Piel que Habito´, retorcida, arriesgada y ridícula



“¿Podemos dejarlo para mañana? Es que el tigre me ha dejado destrozada.”
-Vera (Elena Anaya)
De acuerdo, soy masoca. Lo admito, lo acepto, y cuando tenga un hueco me pondré en tratamiento. Mientras tanto voy a dedicar un poco de tiempo a hablar de la última y aplaudida película del laureado Pedro Almodóvar, sin duda uno de los pesos pesados de nuestro cine, y uno de los más populares fuera de nuestras fronteras. Un director indudablemente personal… al que no trago, no me creo sus películas, sencillamente no me gusta su cine. Admitir algo así para alguien como yo, que se precia de ver de todo un poco y de pretender tener el mínimo posible de prejuicios a la hora de visionar y valorar cine no es tarea fácil. Pero hay que ser fiel a uno mismo, y si tengo que ser sincero, `La Piel que Habito´ me parece una memez de película, con únicamente un par de puntos realmente interesantes, que se van al garete por ser quién es el director.
Y es que, cuando se suele hablar de alguien o algo, mucho más en cuestiones de arte, el decir que se tiene personalidad es el mayor elogio que se puede hacer. Eso significa que destacas, que tienes algo que te desmarca del resto, que te hace especial. Eso puede llevar a la errónea conclusión de que la personalidad es algo de por sí bueno, cuando no tiene por qué. En mi caso, Pedro Almodóvar no puede ser un ejemplo más claro de ello. El tío tiene personalidad, no voy a negárselo, sabe imprimirle un toque especial a sus films, hacerlos suyos por así decirlo. Y eso es importante para todo artista que se precia, pero también conlleva que, del mismo modo que la distinción es fuerte, las reacciones a algo así pueden ser muy contrarias. O lo amas, o lo odias. Yo no lo odio, pero desde luego no lo trago en muchos sentidos. Fui a ver `La Piel que Habito´ porque leí que, por su trama, podía cautivar incluso a los no fans del manchego. Y es cierto que la trama es atractiva, muy oscura y siniestra, pero las formas de Almodóvar la malogran, echándola a perder.

Centrándose en las claves de un encierro, un secreto del pasado y una venganza muy retorcida, la historia recuerda por momentos, y mucho, a `Old Boy´ (id, 2003) y por ende a el resto de la trilogía de la venganza dirigida por el no menos estrambótico Park  Chan-Wook, `Simpathy For Mr. Vengeance´ (2002) y `Simpathy For Lady Vengeance´ (2005). Y no es precisamente el director japonés un maestro de la sutilidad o de la moderación, lo reconozco (aquí mismo tuve que defender una de sus idas de olla por considerarla excitante y divertida), pero en mi opinión con su excesividad y manías logra sacarle provecho y vida a puntos de partida que en manos de otro no darían nada de sí. En otras palabras, que lo que hace va en beneficio de la historia, la agranda, la hace mejor y he ahí la grandeza de un buen director: el hacer lo mejor para la historia que está contando, y no lo mejor para él y la alimentación de su propio egocentrismo.
En su intento por hacerla suya, Almodóvar ahoga las posibilidades de la novela de Thierry Jonquet, y su exploración del amargo drama de unos personajes atormentados y retorcidos carece de humildad o de compasión. Tenemos, eso sí, momentos como el del trigetón, que son de una vergüenza ajena como para abandonar la sala al instante, o la orgía que se monta en mitad del bosque (entiendo que la sexualidad es uno de los temas básicos de su cine y no digo que haya que esconderla, pero sin cruzar la línea del ridículo). Mientras, la historia, la verdadera historia y sus personajes se descuidan bastante, cuando no completamente. Las incoherencias son tales como centrar excesivamente el interés de la trama en la primera parte en algo que luego no tendrá realmente ninguna relevancia más tarde: el tema de endurecer la piel. El doctor interpretado por Antonio Banderas podría estar haciendo eso como cualquier otra cosa, pues sus objetivos y obsesiones con la mujer que mantiene cautiva son en realidad otros.

Por otra parte la confesión de la ama de llaves queda también muy “almodovariano”, pero tampoco tiene ninguna función ni sentido en la trama, podría habérsele sacado fácilmente algún partido, pero tal cómo queda expuesto parece completamente gratuito. Así las cosas, he de reconocer que me resultó una película bastante aburrida y con la que es casi imposible conectar (la puesta en escena excesivamente seca del director de `Hable con Ella´ tampoco ayuda, pues el hombre tiene unas obsesiones visuales más propias de un decorador de interiores que de un director realmente capaz de crear algo visualmente sugerente). Lo mejor es el tramo central, cuando se ofrece el punto de vista del prisionero y entendemos qué papel juega el personaje de Elena Anaya en la historia. Esa parte me tuvo interesado y hasta cierto punto enganchado, pero la cosa vuelve irse pronto al garete con un clímax facilón y una resolución risible (SPOLER en plan, “eh mamá, he vuelto y soy travesti” FIN SPOILER).
En definitiva, ese cierto interés en su parte central son buena muestra de lo que podía haber dado de sí una historia lo suficientemente atractiva y arriesgada, pero que en manos de Almodóvar se torna en algo ridículo por momentos, aburrido casi todo el tiempo (sobre todo su bloque inicial resulta demasiado denso) y, para mí al menos, olvidable. Huelga decir que no comparto la opinión de los que la consideran de lo mejor de este año, ni de lejos. Me quedo con las correctas actuaciones de Banderas (un actor que por lo general me cae simpático) y de unos esforzados Elena Anaya y Jan Cornet, además de la llamativa música de Alberto Iglesias. Por lo demás, no tengo ningún interés en volver a ver `La Piel que Habito´, y eso es lo peor que se puede decir de una película. 

5 comentarios:

Unknown dijo...

La única película que he visto de este director (lo admito no soy cinéfilo, sólo alguien que disfruta mucho de ver películas) y a mi no me ha causado tan mala impresión. En realidad me ha parecido un thriller bastante interesante tanto por su trama como por su desarrollo y la dirección de Almodovar me pareció bastante destacable con sus toques como del género de terror y suspenso y si hay algo por lo que admiro mucho al cine español es precisamente por su trabajo con los thrillers. Saludos

www.rlnmovies.blogspot.com

Alain Rodriguez dijo...

No, si veo que la película gusta mucho, así que supongo que será cosa mía. Almodóvar sencillamente no me entra, lo he intentado con varias películas y nada. Esta tiene cosas interesantes (como digo es arriesgada), pero también demasiadas salidas de tono que me sacan completamente de la ficción.

Unknown dijo...

Es casi casi lo que me pasa con el cine de Spielberg jaja, aunque sí lo trago, pero nunca le he encontrado toda la maravilla que la gente le admira, con el debido respeto que merece este director.

Alain Rodriguez dijo...

Hombre, es que Spielberg son palabras mayores. Te puede gustar más o menos en su estilo y en cada género (pues los ha tocado casi todos: aventura, drama, comedia, ciencia-ficción, infantil, bélico...), pero es un narrador como la copa de un pino. El día en que Amodóvar dirija algo del nivel de `La Lista de Schindler´ le beso el culo.

Unknown dijo...

Jajajaa no, tampoco comparo a Spielberg con Almodovar. Una cosa es que no le encuentre toda su maravilla, pero tampoco me atrevería a compararlos, aunque ese último comentario sí que me ha hecho reír jajajajaja. Saludos