viernes, 27 de mayo de 2011

`Destino Oculto´, el amor no conoce barreras



“Sólo me queda la libertad de elegir, y la elijo a ella.”
-David Morris (Matt Damon)
¿Habéis tenido alguna vez esa extraña sensación de que vuestra vida está planificada? Como si no tuvieras realmente el control de nada y sencillamente las cosas llevasen ya un rumbo fijo. Claro, ahora me saldréis con eso de que la culpa es nuestra, que nos dejamos llevar y elegimos no cambiar, pero que realmente tenemos el poder de elegir. ¿De verdad? Porque es oír esto y yo me parto de risa. Pues anda que no son complicadas y enraizadas las razones que nos llevan a tomar cualquier decisión, que vienen condicionadas por millones de factores externos: entorno, familia, amigos, cultura, educación, religión... Todo ello da como resultado una especia de mejunje que supuestamente somos nosotros. ¿De verdad queda ahí un mínimo hueco que podamos llamar pensamiento propio? ¿Un ligero atisbo de auténtica libertad?
En este no poco interesante y complicado berenjenal se ha metido el guionista George Nolfi (`Ocean´s Twelve´, `El Ultimátum de Bourne´), que ahora debuta como director adaptando el relato corto `Equipo de Ajuste´, del autor de culto especializado en ciencia ficción Phillip K. Dick, cuyos escritos han dado como origen películas como `Blade Runner´ (id, Ridley Scott, 1982), `Desafio Total´ (Total Recall, Paul Verhoeven, 1990), `Minority Report´ (id, Steven Spielberg, 2002) o `A Scanner Darkly´ (id, Richard Linklater, 2006). Con Matt Damon y Emily Blunt al frente del reparto, la película nos sumerge en una fantasía paranoide, en la que el destino de la humanidad es controlado por un misterioso grupo de agentes dirigidos por una entidad superior (algo así como dios, si bien el film esquiva deliberadamente las referencias religiosas), que tienen como misión que todo salga según el “plan”.


Pero a pesar de lo que pueda parecer, `Destino Oculto´ (The Adjustmen Bureau, 2010) no es un thriller ni una película de ciencia ficción. Tiene ingredientes para serlo pero no lo es por el modo del director de abordar la historia (que es en definitiva lo que da a una película su personalidad). En este caso el film dirigido por Nolfi es ante todo y sobre todo una sencilla y clásica película romántica, sólo que esta vez los obstáculos que deberán de afrontar la pareja no serán conocer a sus respectivas familias o resolver algún estúpido malentendido (como en cualquier comedia romántica prefabricada). No. Está vez el amor debe de vencer al mismísimo destino, representado por unos fríos hombres trajeados, que se interponen en el camino de la feliz pareja sencillamente por el hecho de existir.
En resumen la historia es esta: el congresista David Morris (Damon) y Elise (Blunt) se conocen por accidente la noche en la que David pierde las elecciones con las que aspiraba a ser senador. La química entre ellos surge en el acto, pero ella debe de marcharse precipitadamente, a pesar de lo cual ese breve encuentro sirve para motivar a David su discurso más honesto y poderoso hasta la fecha, que vuelve a catapultarle como favorito para las próximas elecciones. Morris y Elise no debían de verse nunca más, pero por un fallo del “equipo de ajuste” vuelven a encontrarse haciendo peligrar inesperadamente el “plan”. Es por ello por lo que el equipo se descubre ante David, dándole a entender que harán lo que sea necesario para evitar que la relación continúe. Pero David no está dispuesto a que nadie dicte su destino, y lo pondrá todo en peligro  (su vida, su prometedor futuro, incluso el destino del mundo) por estar con Elise.

No es que la propuesta de `Destino Oculto´ sea especialmente original (ya habíamos visto cosas parecidas y mucho mejor tratadas en `Dark City´), pero tampoco se puede negar su indudable potencial. Al fin y al cabo la película de Nolfi es un relato sobre la búsqueda de la libertad y de cómo tomar las riendas de nuestra vida, portando como bandera esa cosa tan extraña y poderosa llamada amor. Tampoco se puede negar el talento y el compromiso de un equipo muy competente, como lo es el propio Nolfi, Matt Damon (que coincidió en cartelera con esta película con otros dos estrenos, `Valor de Ley´ y `Más Allá de la Vida´, lo que se dice un tío trabajador), y la estupenda pareja que forma con Emily Blunt (genial el primer encuentro en los baños), el excelente secundario Terence Stamp (impecable como siempre), y el compositor Thomas Newman, que nos regala una partitura a ratos realmente bella y en otros (¿cómo decirlo?) demasiado típica de él.
No se puede, pues, ser demasiado cruel ni exigente con una película realizada con tanto talento y buenas intenciones, si bien no se puede menos que decir que `Destino Oculto´ no es todo lo buena que podría ser, y que te deja (literalmente y en el sentido menos sexual de la palabra) a medias. Claro que hay sentimiento en la historia de amor, pero falta dramatismo y desesperación a la hora de frustrarla y que ésta llegue finalmente a buen puerto (la muy sosa resolución). También hay interés y puntos curiosos en el controlador “sistema” que propone el relato, si bien al final todo se acaba quedando en la anécdota (el funcionamiento de las puertas, el librito que todos llevan…) y en la moraleja barata (el aleccionador discurso final, que por poco estropea totalmente la película).

Todo ello acaba dejándome la sensación de que efectivamente ha habido más talento y buenas intenciones en `Destino Oculto´ que inteligencia a la hora de llevar a buen puerto su prometedor (pero nada fácil de tratar) punto de partida. Pese a la buena labor de los actores que intervienen como agentes (especialmente Stamp), el llamado “equipo de ajuste” no acaba de cuajar ni de resultar del todo creíble (lo del sombrero y la lluvia es ridículo), como tampoco lo es la manera de retratar el destino, el libre albedrío o la insinuación de una “entidad superior” (dios). De hecho la película funciona mucho mejor en su apartado amoroso, y da la sensación de que deberían de haber explotado más esa parte (pues Damon y Blunt tienen una química perfecta) y la de la necesidad de luchar contra imposiciones externas, en lugar de intentar dar explicaciones sobre algo que realmente no tiene demasiado sentido.
Pese a todo `Destino Oculto´ se apoya lo suficiente sobre el buen talento de sus artífices como para sostenerse y no desmoronarse como el fragilísimo castillo de naipes que de hecho es. Se ve con agrado y entretiene, además de poseer un par de secuencias bastante bien rodadas (ese breve plano secuencia en el que se ven a los protagonistas atravesando las "puertas mágicas", que queda muy bien como truco), pero la verdad es que también es un poco sosa, que le falta un poco de garra y pasión a la hora de rematar la faena. Como digo, que te deja a medias.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Pues a mi si me ha gustado! Jaja. Será por la gran química entre Damon y Blunt; o porque me siento muy identificado en gran parte con los personajes y su situación o lo que sea, yo la disfrute bastante y está próxima a formar parte de mi colección de DVD's jajaja.

Buen post :) Saludos

Alain Rodriguez dijo...

No creo haber dicho que a mí no me ha gustado. Digamos que aproximadamente la mitad de la película me encanta, toda la parte romántica y las actuaciones de Damon y Blunt, que hacen muy buena pareja.

Es la parte de ciencia ficción la que no me acaba de convencer, hay buenas ideas pero no están bien aprovechadas en mi opinión.