M. Night Shyamalan, el prodigio indio

“Siento mucha alegría cada vez que tengo una gran idea.”

Si hay un director que represente los ideales de originalidad y personalidad en el cine comercial del panorama actual norteamericano ese es M. Night Shyamalan, cuyo nombre original (bastante menos artístico) es Manoj Nelliyattu Shyamalan. Y esto tiene merito si tenemos en cuenta que Night no lleva ni siquiera dos décadas haciendo profesional y que (a día de hoy) tan sólo ha estrenado ocho películas (conocidas seis).

Este autentico prodigio nació en Pondicherry (India) en 1970, pero creció en Penn Valley (Pennsylvania), un suburbio de Filadelfia, lugar donde más tarde ha rodado casi todos sus films. A los ocho años le regalaron una cámara de Súper 8 (formato de película cinematográfica), y de ahí surgió su pasión por hacer cine (pasión que dio como fruto cosas como ésta). A los diecisiete años ya había dirigido 45 películas caseras (algunas de ellas se pueden ver como extra en los DVDs de sus películas famosas, y realmente no tienen desperdicio). Estudió en la escuela Tisch de las Artes (TSOA), en la universidad de Nueva York y en aquella época cambió su segundo nombre, Nelliyattu, por el mucho más misterioso Night (noche).

Su primer largometraje (que realizó en 1992) fue `Praying with Anger´ (película que he intentado encontrar, pero que al parecer está completamente inédita en nuestro país) y que está basada en parte en su primera visita a la India desde que su familia emigró a los Estados Unidos. Tanto ésta como su segunda película – `Los Primeros Amigos´ (1996) – no fueron especialmente grandes éxitos y pasaron sin pena ni gloria. Por suerte para el bueno de Night su guión de `El Sexto Sentido´ llegó a las manos de Bruce Willis (tipo que por lo que se cuenta debe de ser la mar de simpático, y al que medio Hollywood le debe algún favor) que quedó encantado con el material y que se ofreció a buscarle producción y a protagonizarlo para sorpresa de Shyamalan (una de sus películas favoritas es `Jungla de Cristal´).

Con `El Sexto Sentido´ Night dio la campanada, y paso de ser un completo desconocido a una de las nuevas promesas del cine americano. La película fue un rotundo éxito de crítica y público (a día de hoy ocupa el puesto 36 en la lista de las películas más taquilleras de la historia en USA), y fue nominada a seis Oscar, entre ellos: Mejor director y Mejor guión original (las únicas dos veces en las que Shyamalan ha estado nominado).

Pocas veces Nelliyattu Shyamalan ha convencido tanto como con esa película, pues en sus siguientes films ha ido dividiendo tanto a la crítica como al público, entre los que le consideran un completo fraude (dicen que toma el pelo al público) y los que le veneran sin contemplaciones. Sus detractores suelen achacar las claves del éxito de las películas de Night a los golpes de efecto baratos y a los giros inesperados. Yo en cambio considero que las verdaderas claves del éxito del su cine residen en la humanidad que desprenden sus personajes, así como de la emotividad de las historias que cuenta, que a pesar de tener elementos fantásticos siempre apuestan por un punto de vista lo más realista posible.

Hay una serie de elementos que caracterizan el cine de Shyamalan. Ya hemos hablado del punto de vista realista para elementos fantásticos. El giro inesperado al final es algo que también caracteriza `The Six Sense´ y las otras dos películas que la siguieron, pero que pierde relevancia en sus últimos trabajos. También es curioso que Night siempre haya contado con grandes estrellas (Bruce Willis, Samuel L. Jackson, Mel Gibson) para películas que distan mucho de ser blockbusters, y que siempre apuestan por un tratamiento minimalista de historias que suelen requerir mucho dinero y grandes efectos especiales (algo que parece haber cambiado en `The Last Airbender´).

No se puede hablar de Shyamalan sin hablar de su colaboración con el aclamado compositor James Newton Howard, con quien ha trabajado desde `El Sexto Sentido´ y que forman una de las parejas director-compositor más estables y que mejores resultados dan de su fusión. Y es que la música de Howard complementa perfectamente el cine de Night, le da vida y emoción, y por su parte las imágenes de Night parecen inspirar a Howard, que nunca ha hecho mejores trabajos como con él.

También es curioso el hecho de que Night siempre aparezca en todas sus películas, manía que parece haber heredado de Hitchcock (uno de sus directores favoritos, junto a Steven Spielberg). Y no siempre se han limitado a simples cameos, como en `Praying with Anger´ o `La Joven del Agua´, en los que tenía papeles bastante relevantes (ha llegado a confesar que le interesa bastante la interpretación, pero que no se dedica a ella porque siempre le ofrecen papeles de indio…).

En definitiva, M. Night Shyamalan es uno de mis directores favoritos (lista que nunca he llegado a hacer, la verdad). Y no lo es por ninguna razón en especial, sencillamente su cine tiene algo que me llega, algo especial que no encuentro en otras películas. Dos de las mejores experiencias que he tenido en una sala de cine (cuando tenía alrededor de diez años y empezaba a ir a ver “películas para mayores”) las tuve con su `Señales´ y `El Sexto Sentido´ (`Unbreakable´ la descubrí más tarde, en DVD) y, sinceramente, espero que este director siga teniendo muchas “grandes ideas”.

PD: Esta semana pasada se estrenó su último film - `Airbender, el Último Guerrero´ - en Estados Unidos, con unos ingresos considerables pero unas críticas devastadoras. Aquí se podrá ver a partir del 6 de Agosto, día en el que su director cumplirá cuarenta años.